Además de la cocina, los viajes son mi pasión. Y el pre y post viaje son para mi casi tan agradables como los días de viaje en si. Uno de los últimos mini-viajes que hemos hecho, ha sido a la ciudad de Múnich. 3 días, de viernes a domingo nos dio mucho de si para conocer la ciudad y enamorarnos de ella. Así que aquí os dejo el diario de nuestro viaje, con detalle de donde comimos, que hicimos y como llegamos hasta allí (datos que me parecen súper esenciales a la hora de viajar y de preparar un viaje). Espero que os sirva para disfrutar de esta ciudad tan agradable!!!
Día 1 - Bilbao-Múnich
Llegamos a Múnich con
Lufthansa a las 10.00h.
Directamente nos
dirigimos hacia la estación del tren que hay en el propio
aeropuerto. Los tickets se pueden comprar sin salir del aeropuerto o
en la estación de tren. Si se compra en las maquinas del aeropuerto,
no hace falta validarlo a la entrada de las estaciones de tren.
Nosotros compramos un
billete de día para toda la línea de tren (Gesamtnetz) valido para
hasta 5 personas en la red entera. Coste 22,30€ (el billete
individual desde el aeropuerto hasta el centro cuesta 10,80€, y
solo es para un trayecto).
Tomamos la línea S8 que
te lleva hasta la estación central (Hauptbanhof). También la línea
S1 te lleva hasta la estación central.
Nuestro hotel esta a 2
calles de la estación central, en un barrio de comercios y
restaurantes turcos. La zona es tranquila y con todos los servicios
necesarios: hoteles, bares, restaurantes, supermercados...
Nos hospedamos en el
Hotel Littys, en una habitación doble con baño privado por 176€.
Teníamos el desayuno incluido, aunque no fue nada espectacular. Era
un desayuno buffet de poca variedad. El wifi solo existía en la zonas
comunes. Se trata de una hotel correcto, sencillo, con personal
amable y de buena relación calidad-precio. A 3-5minutos andando de
la estación y 15-20 de Marienplatz.
Como el billete de tren
nos duraba todo el día, aprovechamos para sacarle rendimiento.
Después de dejar las
maletas en el hotel, nos dirigimos al
campo de concentración
de Dachau. Para ello tomamos el tren S2 hasta Dachau, pasa
cada 20minutos aproximadamente. Una vez salimos de la estación de
Dachau, tomamos el bus 726 hasta el campo de concentración El mismo
billete de tren sirve para el bus.
En el campo alquilamos
una audio-guía en castellano por 3,50€ cada una. Es fácil guiarte
con el mapa y la audio-guía , pero creo que los tours organizados
también pueden ser una buena idea, pues seguramente cuenten
historias mas concretas y mas anécdotas que las grabaciones. La
visita al campo por libre te puede llevar horas, nosotros tardamos
aproximadamente 3horas. Merece la pena verlo, porque es algo que no
se encuentra en cualquier sitio. Eso si... el cuerpo no se te queda
igual.
Volvimos a Múnich de
nuevo en bus y tren y decidimos ir a hacer el check.in en el hotel.
La habitación sencilla pero correcta, 2 camas, baño con ducha, una
mesa con sillas y televisión. Suficiente!!
Caminando fuimos hacia
Marienplatz, pasando por Karlstor y viendo todas las tiendas que hay
por la zona comercial. Llegamos a Marienplatz y vimos los
ayuntamientos, las iglesias, alguna cervecera que había de camino...
nos situamos un poco por la zona y decidimos seguir nuestro camino
hacia Englischer Garten pues daban lluvia para el día
siguiente, y no sabíamos si podríamos verlo bien.
Así que caminando y
callejeando, llegamos al Jardín Ingles. Un parque muy grande donde
la gente esta descansando, jugando, cantando, haciendo deporte.... y
tomando cervezas. Si, bebiendo en el Biergarten junto a la pagoda
Japonesa (para que lo ubiquéis). Desde mi experiencia en la ciudad,
uno de los mas recomendables. Allí llegamos como turistas novatos en
los Biergarten, y tuvimos que preguntar sobre que cerveza beber,
sobre el tema de las jarras de cerveza y la comida. Todo un máster
hay que hacer. Nos tomamos 2 cervezas diferentes que acompañamos con
unas patatas con salsa agria (15,70€) En este precio te incluyen la
fianza de las jarras de cervezas que luego debes devolver junto con
una moneda que te dan y así recuperar el dinero que has invertido.

En el camino de vuelta al
centro, descubrimos donde hacen surf los muniqueses. En el rio del
Jardín Ingles junto a la “Haus der Kunst” . De vuelta también
pasamos por Maximilian Strasse, una de las calles de mas lujo de
Múnich Los coches allí aparcados y el tipo de tiendas que hay te lo
demuestran al momento. Muy cerca des esta calle esta la cervecería
Hofbrauhaus, o la cervecera real. Para mi gusto muy masificada. Es la
mas famosa, y es casi imposible encontrar hueco para tomar o comer
algo en algunos momentos. Así que decidimos irnos a otra, e
intentarlo en otro momento. Acabamos cenando en Weisses Brauhaus
en C/ Tal 7. nos tomamos 3 helles (cerveza rubia y la mas solicitada)
junto con un plato de salchichas variadas y un bretzel. (27,15€)
Hay que tener en cuenta
que las cervezas son de medio litro, por lo que acabas visitando el
baño mas a menudo que en otros viajes. Ya con el puntillo de la
cervecita y con sueño por el madrugón, decidimos ir al hotel a
descansar, que al día siguiente había que patear. Aun así, en el
hotel nos tomamos una cerveza mas para no perder la costumbre (2,80€)
Día 2 -Múnich
Tras desayunar, nos
dirigimos a la estación central, donde a las 10h se queda para
iniciar el tour gratuito de Sandemans por la ciudad.
Este mismo tour empieza realmente a las 10,45h en Marienplatz, así
que es mejor ir directamente a las 2 convocatoria, porque en la de la
estación ni te cuentan nada ni se ve nada.
El tour te lleva por los
puntos céntricos mas interesantes de la ciudad. Merece mucho la pena,
porque además de explicarte muchos atractivos turísticos, también te
cuentan historias de la ciudad, y le puedes preguntar al guía lo que
necesites, tanto sobre lo que estas viendo, como de la ciudad y sus
locales. Nuestro guía Pablo, nos recomendó comprar las cervezas para
llevar a los amigos en un supermercado (coste aprox 1€) y las
salchichas en el ViktualienMarkt, que es como comprar en el mercado
del pueblo. Estos tours son gratuitos, en los que tu valoras y pagas
al guía según lo que te haya gustado. Después de 3 horas pateando y
conociendo la ciudad, decidimos ir a comer a una cervecería que
habíamos fichado durante el tour:
Augustiner Am Dom.
Pero antes pasamos por el ViktualienMarkt para comprar las salchichas,
pues los sábados a la tarde no están abiertas la tiendas, y los
domingos tampoco. (Hay que tener en cuenta que aunque sea una ciudad
turística, las tiendas y supermercados permanecen cerrados en
domingo).
Entramos en la cervecería
Augustiner frente a la catedral y empezamos a pedir comida y
cervezas. 5 helles, un plato de salchichas blancas con ensalada de
patata, cerdo crujiente con puré de patatas y un bretzel. (46,30€)
Con la tripa llena y con
litros de cerveza por las venas, de camino al hotel para un
reconfortante siesta, pasamos por el supermercado a surtirnos de
cervezas, mostaza dulce y chocolate.
Después de la siesta,
fuimos en busca de una nueva cerveza a probar. Esta vez encontramos
un hueco en Paulaner am Tal. 2 cervezas 8,50€. (la
jarra de cerveza esta entre 3,80-5€). Después toco probar una
que nos recomendó el guía por el ambiente, que estaba frente a la
Catedral, Andrechs am Dom. Para mi gusto no parecía una
cervecería autentica. Nos tomamos 2 cañas con un queso bávaro por
16,50€. Y tocaba conocer la
ultima del día.... fuimos a Tegernsee am Tal. (como
veis en la calle Tal hay una gran variedad de cervecerías). No tenia
aspecto de cervecería autentica, pero tanto la cerveza como la comida
estaba muy rica. Cenamos una hamburguesa con patatas, una albóndiga
con pancakes de patatas y 2 helles por 30€. Desde mi punto de
vista, es un sitio muy recomendable para comer.
Nuestro día termino aquí
con mas de 3 litros de cerveza en el body. A descansar!!!
Día 3 - Múnich -Bilbao
Ya teníamos visto todo lo
que habíamos marcado como indispensable, así que salimos a pasear y
ver lo que nos encontrábamos. Y.. recordamos que Pablo el guía, nos
recomendó subir al campanario de la Peterskirche pues
tenia una vistas increíbles de la ciudad. Pagando 2 € por persona
tienes el derecho de subir las casi 320 escaleras que hay hasta lo
alto del campanario. Eso si... merecen la pena sufrir un poquito.
Las vistas de 360º de la ciudad son impresionantes. Hicimos tiempo
y vimos el reloj y carrillón del Neue Rathaus que da su espectáculo
particular todos los días a las 11, 12 y 17h. Y allí estuvimos viendo
desde lo alto toda la ciudad. Al terminar, para recuperar fuerzas,
decidimos ir a la HB (Hofbrauhaus) a probar suerte. Y la
tuvimos. Prácticamente vacía, la cervecería Hofbrauhaus merece la pena
ver, y disfrutar. Con banda de música en directo y camareras que
podrían levantarte con un solo dedo... es espectacular. Tomamos 2
cervezas helles (como no) por 8€. Al de 30-40 minutos ya estaba
prácticamente llena, así que nos alegramos de haber ido tan
“temprano”.
Y... donde comemos hoy???
era la gran duda que nos rondaba la cabeza.
Nos acercamos al
ViktualienMarkt donde había un grupo de música tocando
y cantando. Se trata de una biergarten al aire libre en el centro de
la ciudad, y muy autentico. Nos tomamos una cerveza y el mejor
bretzel de todo el viaje por 7,10€. Allí nos hicimos amigos de una
matrimonio muniqués súper agradable con los que practiqué mi poco
alemán. Que gente mas maja!
Después fuimos caminando
hasta el Odeonsnplatz que tiene un jardín al lado y queríamos
verlo. Casualidad había una fiesta de la comunidad griega en Múnich,
y allí nos juntamos a degustar una cerveza y del ambiente de fiesta.
Decidimos volver a
Augustiner am Dom a comer, pues el día anterior
quedamos encantados. Esta vez pedimos un codillo (un trozo nada mas),
albóndigas y 2 helles.(38,90€)
Llego el momento de ir
hacia el aeropuerto, por lo que tras pillar las maletas del hotel nos
dirigimos a la estación del tren. Compramos un billete individual de
ida al aeropuerto para cada uno, que nos costo 10,80€ cada uno. Al
llegar al aeropuerto de Múnich, hay que facturar en maquinas y añadir
el equipaje también en maquinas. Aunque el vuelo se retraso 30
minutos, todo fue muy bien durante el vuelo y en ambos aeropuertos.
A tener en cuenta:
*las jarras de cerveza se
venden en las tiendas y tienen un coste de entre 7-10€. esta mal
que lo diga, pero en algún biergarten si no devuelves la jarra y te
la llevas, habrás pagado por ella entre 1-3€
* He de decir que la
ciudad no es barata para comer. Comer para 1 persona con una cerveza,
sale aproximadamente a 15-20€. Nosotros que cuando viajamos
evitamos cadenas de comida rápida... al final pagamos un poco mas
por comer lo autentico. Pero merece la pena!